En 1819, un químico alemán llamado Friedlieb Ferdinand Runge, descubrió la presencia de un alcaloide del grupo de las Xantinas en semillas de café y decidió llamarlo “Cafeína”.
La cafeína es una sustancia psicoactiva y estimulante que afecta a los receptores de adenosina, así mismo su principal rival social ,la teína, comparte la misma estructura química y pesar de que la gente piense que son diferentes, en realidad la teína y la cafeína son lo mismo.
Con una larga historia de usos, la cafeína se corona como la reina de los estimulantes naturales. En el blog de hoy hablaremos sobre sus beneficios para nuestro organismo y los efectos secundarios que puede tener en el mismo.
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¿Cuáles son los principales beneficios de la cafeína?
La cafeína es uno de los grandes aliados matutinos para la mayoría de los adultos, muchos estudios confirman que alrededor del 90% de la población a nivel mundial consume cafeína todos los días.
Los beneficios de la cafeína en nuestro organismo no solo quedan limitados a una simple función estimulante, sino que van más allá. Los principales beneficios de la cafeína en nuestro organismo son los siguientes:
- Mejora el rendimiento muscular: varios estudios científicos han demostrado que la cafeína excita las contracciones musculares y como resultado aumenta su rendimiento durante la actividad deportiva. Este beneficio tiene gran relevancia para los deportistas ya que es una fuente de energía natural que puede mejorar su nivel de actividad durante los entrenamientos. Más aún, con un mayor rendimiento muscular se permite que la musculatura aguante un mayor tiempo a la hora de realizar ejercicio intenso por lo que esta actividad también repercute en la mejoría del aguante del deportista y permite al mismo ir alargando sus entrenamientos.
- Disminuye la fatiga: este beneficio quizás es el más aclamado por toda la población. La cafeína estimula el sistema nervioso, activando los músculos y produciendo una sensación de actividad que nos empuja a empezar el día con un sentimiento enérgico. La función estimulante de la energía también puede ser útil para los momentos de cansancio, aunque no sea por la mañana. No es poca la cantidad de personas que consumen café después de comer o por la tarde ya que este chute de energía natural sirve para activar el organismo en cualquier momento del día.
- Quema calorías: En la gran mayoría de las dietas, el consumo de cafeína está indicado ya que la función estimulante de la misma propicia una mayor quema de calorías a lo largo del día. Esto se debe a que cuando el organismo funciona más rápido, como lo hace cuando existe un estimulante presente en el mismo, el corazón bombea sangre a un ritmo más elevado de lo habitual y por consecuente el resto del cuerpo funciona acorde, es por ello por lo que al consumir cafeína quemamos calorías más rápido. En relación con el deporte, la quema de calorías se incrementa aún más si consumimos cafeína y realizamos actividad física, pero siempre respetando los niveles recomendados. Este factor puede ser un gran beneficio tanto para personas de a pie como para deportistas.
¿Qué efectos secundarios tiene la cafeína?
El consumo de la cafeína siempre debe de ir acorde con los parámetros recomendados que evitan unos posibles efectos adversos o secundarios. En cualquiera de los casos, a pesar de los beneficios de la cafeína, cabe destacar algunos de los efectos secundarios que puede tener su consumo:
- Inquietud o nerviosismo: la cafeína es un potente estimulante, al estimular el sistema nervioso se incrementa el nivel de frecuencia cardíaca, dicho de otra forma, “todo va más rápido”. Un consumo excesivo de cafeína puede provocar que nuestro cuerpo no asimile del todo el aumento de actividad y por ello se puede provocar un estado de nerviosismo o inquietud.
- Efecto digestivo: existe una creencia popular que afirma que un abuso de la cafeína provoca un efecto laxante, en realidad, la cafeína no es la responsable de dicho efecto. La naturaleza ácida del café provoca un aumento de la producción de ácido biliares en el organismo. Los ácidos biliares son moléculas que facilitan el transporte y la absorción de determinados nutrientes, estos nutrientes por tanto se asimilan más rápido y el proceso digestivo se acelera. Al consumirse café en exceso esto puede tener un efecto laxante ya que dicho proceso se acelera y el organismo no puede seguir un ritmo normal de absorción y asimilación. Al contrario del café, la cafeína no produce este efecto sino más bien el contrario al consumirse en exceso. La cafeína aumenta la producción de orina gracias a uno de sus componentes, por lo tanto, si esta se consume en exceso y no se hidrata bien, el cuerpo puede llegar a generar un estado de estreñimiento no deseado.
- Dependencia: La dependencia a la cafeína como efecto secundario de su consumo se produce cuando este consumo se hace de forma constante y sin mesura, sin embargo, existe un factor psicológico que tiene mucho que ver en la relación de cafeína y dependencia. La cafeína es un estimulante que al incorporarlo en nuestra rutina diaria nos acostumbramos a consumirla todos los días, ya que sus efectos estimulantes nos resultan satisfactorios y nos produce un sentimiento de energía y actividad añadido al empezar o durante el día. Este sentimiento de actividad puede convertirse en algo negativo cuando necesitamos constantemente recurrir a esta sustancia para poder desarrollar nuestro día a día. El hecho de ser adicto a la cafeína no es nada fuera de lo común en la sociedad actual pero no por ello esta dependencia deja de ser un efecto secundario negativo. La dependencia a los estimulantes puede causar otros efectos adversos, por ello es importante tener en cuenta y ser conscientes de las cantidades y la frecuencia en que consumimos este tipo de sustancias para evitar comenzar a crear un estado de dependencia con la misma que pueda llegar a provocar consecuencias en nuestra salud.
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