En el blog de hoy os proponemos una idea diferente para que podáis poner a prueba vuestras habilidades culinarias desde casa. Llevamos varias semanas hablando en nuestros blogs sobre los hidratos de carbono, las diferentes dietas que los reducen o que los eliminan y hoy os traemos una receta de pan bajo en hidratos de carbono que podéis preparar desde casa sin ningún tipo de dificultad.

Podréis comprobar por vosotros mismos cómo se puede cocinar desde casa recetas saludables que se salen un poco de lo común pero que no por ello son menos saludables.

 

Este pan low carb se hace con harina de almendras. Este tipo de harina sustituye a la refinada, lo que le aporta una mayor cantidad de nutrientes que proceden de las almendras.

Además de la harina, este pan es diferente ya que incluye aceite de manzana (es más fácil de encontrar de lo que parece).Es un aceite menos graso que incorpora las propiedades nutricionales de la manzana, pero no queremos daros todos los detalles, ¡A la cocina!

 

Ingredientes

  • Una taza y media de harina de almendras
  • 4 huevos
  • 4 cucharadas de aceite oliva
  • 1 cucharada de aceite de manzana
  • 1 cucharadita de levadura o polvo para hornear
  • 1 cucharada psyllium (opcional)
  • 1/2 cucharadita sal
  • Semillas de girasol y calabaza para decorar

 

Elaboración:

  1. Mezclamos en un bol todos los ingredientes hasta que quede una masa uniforme. Haced una bola y si os hace falta, ponedle harina por encima para que sea más fácil de manipular. Así os asegurarais de que no se quede pegado a la encimera.
  2. Una vez bien mezclado, vertemos la masa en un recipiente engrasado o de silicona. La forma del recipiente la podéis elegir vosotros, sin embargo, hay gente que en vez de utilizar recipientes pone la masa directamente en el horno y esta coge la forma según se vaya horneando.
  3. Añadimos en la superficie un puñado de semillas de girasol y pipas de calabaza para decorar. Este paso podéis adaptarlo a vuestros gustos, generalmente las semillas de calabaza o de girasol son las que más gustan al público, pero también podéis probar con semillas de chía.
  4. Lo metemos en el horno a unos 200 grados aproximadamente (siempre depende de cada horno) hasta que veamos que va cogiendo un color dorado. Para comprobar que está hecho por dentro introduciremos un cubierto o un palillo y cuando este salga completamente seco, ¡tendremos hecho nuestro pan keto!
  5. Os recomendamos no cortarlo nada más salir del horno y esperar un tiempo a que se enfríe, de esta forma lograréis dejar la masa reposar del todo y tendréis una consistencia mucho más solida en la masa. ¡Ahora si, a disfrutar!
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