El Coronavirus puede haber limitado la cantidad de personas que pueden asistir a nuestras cenas navideñas… pero sabemos que no por ello vamos a dejar de comprar jamón, marisco y polvorones en las fechas próximas.
Nuestro equipo ha estado investigando sobre las dietas más famosas y hemos realizado una pequeña valoración sobre las mismas, que esperamos os ayuden a despejar las dudas sobre qué dieta realizar si al final de las navidades queréis empezar el año nuevo quitándoos los kilitos de más.
La primera dieta que hemos puesto bajo lupa es la Dieta Atkins. Esta dieta, de 4 fases, fue inventada por el cardiólogo estadounidense Robert Atkins en 1970. Su método se basa en bajar de peso rápidamente a través del conteo de calorías y el consumo de grandes cantidades de proteínas y pocos hidratos de carbono, apenas 15 gramos al día lo que equivale a 1 fruta de pequeño tamaño. Este método da lugar a una gran pérdida de micronutrientes, como vitaminas y minerales procedentes de las frutas, además, a día de hoy las investigaciones no se deciden sobre cuáles pueden ser los efectos adversos a largo plazo.
La segunda dieta que nos ha parecido muy interesante es la Dieta Dukan. El dietista francés Pierre Dukan decidió “revolucionar” el mundo de la dietética con su método nutricional para perder peso. Con un proceso de 4 fases, 2 para perder peso y 2 para mantenerlo, la dieta Dukan, similar a la Dieta Atkins, fomenta el consumo de proteínas bajas en grasas y verdura, huyendo de los carbohidratos (al menos en las dos primeras fases). La diferencia con la dieta Atkins es que esta dieta se permite no contar calorías, le da gran importancia al ejercicio físico y las proteínas de elección son bajas en grasas.
A diferencia de otras dietas que también prohíben muchos alimentos, Dukan decidió tomar provecho de su método para lanzar en el mercado su propia gama de alimentos para la dieta, incluyendo productos como galletas de avena proteinadas.
La Dieta Mayo ha sido sin duda una de las dietas que más nos ha sorprendido. Esta dieta se centra en el control de las calorías ingeridas consiguiendo un déficit calórico. Un déficit calórico consiste en consumir menos calorías de las que se requieren al día y quemar más. La dieta Mayo consiste en consumir 800 calorías diarias promoviendo una pérdida de peso muy rápida aunque no efectiva ya que los efectos no se ven prolongados en el tiempo debido a la falta de modificación de hábitos.
La Dieta Zona es un concepto nutricional que fue diseñado por el médico Barry Sears, se basa en controlar mucho lo que se come consumiendo grandes cantidades de proteínas, frutas y verduras. El defecto de esta dieta está en el control excesivo que exige. Dividir el plato, cronometrar el tiempo en comer, medir los tiempos entre comidas, pesar los alimentos… es una dieta que no da días libres y que puede resultar difícil de seguir y muy dura.
La Dieta Mediterránea. Una dieta que por suerte tenemos muy inculcada en el territorio español, productos frescos, integrales, frutas, verduras… Esta dieta promueve el bienestar alimenticio y la pérdida de peso a través del consumo de alimentos de origen vegetal, grasas “buenas” monoinsaturadas y disminuyendo el consumo de hidratos de carbono y carne. No elimina, sino que minimiza, el consumo de productos altos en azúcares y grasas, sin perder de vista que comer es un gusto y que una dieta no debe ser prohibitiva sino orientativa hacia un estilo de vida más saludable y activo.
Por último pero no menos importante, la dieta en base a tu genética. Esta dieta se basa en la indicación de recomendaciones personalizadas basándose en la genética de cada persona. A través de un estudio de tu ADN se puede conocer la capacidad que tiene tu cuerpo de asimilar los hidratos de carbono, grasas, proteínas y además de ofrecer información muy relevante sobre las intolerancias alimentarias. Su objetivo principal es tratar nutricionalmente de forma personalizada e individualizada ya que no a todo el mundo le sienta bien el mismo tipo de dieta.
Cabe destacar la importancia que tiene presentar una composición corporal saludable y un estilo de vida saludable. El consumo y la elección de los alimentos es un tema bastante importante que puede afectar a nuestra salud de forma tanto directa como indirecta. Si crees que es el momento de cambiar, acude a un profesional sanitario nutricionista para buscar ayuda.